Un mapa conceptual es una herramienta de aprendizaje utilizada por estudiantes que buscan resumir las partes más resaltantes e importantes de un tema en concreto. En esta ocasión aprenderás todo sobre un mapa conceptual de una célula.
¿Cómo hacer un mapa conceptual de la célula?
Para realizar un mapa conceptual (en este caso de la célula) es importante que conozcas bien el tema el cual vas a resaltar. No obstante, también es importante que tomes en cuenta los siguientes pasos para realizar un mapa conceptual propio:
Elige en donde dibujarás tu mapa conceptual:
El primer paso a realizar será seleccionar el espacio en donde plasmarás el mapa conceptual de la célula; esta podría crearse en papel, un pizarrón o cartulina.
Identifica el concepto principal de tu mapa:
Identificas el tema principal del mapa; debes orientar al lector y solucionar sus dudas a medida que este siga leyendo las palabras claves del mapa
Identifica conceptos claves con relación al tema principal:
Como fue mencionado con anterioridad debes conocer muy bien el tema. Si este se trata de la célula, el mapa debe estar estructurado con tipos de célula, diferencias u otros.
Selecciona la figura que vas a utilizar para enmarcar las palabras claves:
Es importante que conozcas que figura utilizarás para dar el tema a entender. Por lo general los mapas conceptuales enmarcan palabras de importancia con figuras como: cuadros, rectángulos y círculos.
Organiza tu mapa y hazlo entendible:
Una vez hayas encontrado las palabras claves o de relevancia para tu mapa deberás organizarlo a partir de figuras o líneas. Esto se conoce como organización jerárquica.
Ajusta las ideas adecuadamente:
Es importante que a medida que vayas elaborando tu mapa visualices si es completamente entendible; para esto es importante que lo estudies con tiempo y determinación.

¿Qué debe llevar un mapa conceptual de la célula?
Ahora bien, partiendo del conocimiento anterior, y del tema principal pasemos a realizar un mapa conceptual de una célula. Al determinar el paso 1 podrías realizar tu mapa como lo indica el paso número 2, y determinar el concepto principal, que en este caso sería: la célula. Pasamos a lo siguiente.
Como lo menciona el paso 3, debemos enfocar el tema principal a los conceptos de interés con relación al tema; esto te permitirá darle sentido al aprendizaje que este mapa otorgará.
Partiendo de “la célula” nos vamos a su “clasificación” (eucariota y procariota) para luego enfocar con una línea, que la eucariota es una célula animal y vegetal. Todo esto estructurado como lo menciona el paso 4; con figuras en las palabras claves y líneas que ayuden a organizar mejor las ideas.
Por último el paso 5 te ayudará a perfeccionar la estructura de tu mapa, haciéndolo visualmente más organizado y deducible. Además invita a que sigas informándote al respecto, para que así puedas ampliar mejor las palabras que agregarás al concepto; mientras más completo sea tu estudio, más conocimiento aportará.
Ejemplos de mapas conceptuales de célula
Ahora bien, una buena idea para crear un mapa conceptual para la enseñanza es guiándote de los ejemplos de otros mapas que partan de un mismo tema. Esto te ayudará a perfeccionar tu propio mapa, y que tú objetivo académico sea completado.
En el ejemplo mostrado en la imagen, igual que en otros visto anteriormente como en el mapa conceptual del agua o incluso en el mapa conceptual de la materia, podemos ver que los conceptos de relevancia están dentro de un rectángulo de color fuerte; aparte de esto, las líneas se ven interrumpidas a la mitad con palabras de conexión, las cuales le dan mayor definición a los siguientes recuadros.
A medida que se analiza este ejemplo se puede comprender y memorizar un tema amplio de forma sencilla y rápida. Este mapa aclara lo siguiente: La célula, se define como una unidad estructural de los seres vivos; con un tamaño y forma variable aunque siempre microscópica. De este concepto pasamos a la definición de un tipo de célula, la eucariota, en donde el mapa nos deja ver sus características, y conocer con detalle las partes que conforman su estructura.
¿Cómo realizar un mapa conceptual de la célula fácil?
Si aún se desconoce cómo determinar que palabras claves pertenecen a un mapa conceptual de la célula, existe un método de ayuda sencillo de realizar. En una hoja realiza una investigación completa sobre el tema. Con un resaltador de color llamativo selecciona todas las palabras que consideres ideales para la realización del mapa.
Una vez hayas finalizado solo quedará traspasar la información a una hoja de prueba en donde elaboraras un boceto; traspasa dicho boceto a una hoja limpia en donde con pocos detalles y colores finalizarás tu trabajo.
Todo sobre una célula
La célula es una parte importante de los seres vivos, la cual en su estructura posee todo el material necesario para el buen funcionamiento del organismo del ser vivo que lo porta. Entre las funciones indispensables que posee cada célula se encuentra:
- Crecimiento.
- Nutrición.
- Reproducción.
Por otra parte, la célula se clasifica en 2 tipos: eucariota y procariota. Ambas se caracterizan por poseer formas, tamaños y funciones distintas, no obstante, su mayor diferencia se encuentra en su núcleo; las células eucariotas poseen un núcleo, una membrana plasmática, material genético y citoplasma. Mientras que las células procariota se diferencias por poseer todas las características anteriores, menos el núcleo.
Estructura de una célula
Gracias a los microscópicos ópticos podemos conocer el día de hoy la estructura que poseen las células, y la definición de cada una.
Núcleo célular
El núcleo célular tiene la función de resguardar el material genético de una célula en el centro de la misma; y en el caso de las células procariotas, la cual no tiene un núcleo, esta contiene su material genético disperso por toda su estructura.
Membrana plasmática
La membrana plasmática es la encargada de reconocer que material entra o sale de una célula.
Citoplasma
El citoplasma es el interior de una célula, en el mismo se aprecia una estructura celulosa que posee el nombre de organelos. Esta se encarga de que toda la estructura de la célula funcione adecuadamente; encargándose de su respiración, digestión, almacenamiento, excreción u otras funciones.